Uno de los puntos críticos en el reordenamiento de la economía y finanzas globales está dado por establecer cuan débil estará el dólar a futuro, y eventualmente cual será el signo monetario que le hará sombra y hasta lo reemplace.
Sobre este tema podemos ver a diario que los medios exhiben las variadas alternativas de reemplazo al signo monetario sin olvidar que cada una de ellas está ligada a distintos intereses nacionales o sectoriales. Por ejemplo el Yuan, los Derechos Especiales de Giro del FMI, el revitalizado EURO y hasta una canasta de monedas de contenido aún no muy preciso.
Y mientras persiste esa duda hay quienes ganan y quienes pierden en la rueda de mercados de cada día con los distintos arbitrajes, por ejemplo: cada vez que se debilita el dólar contra el Euro, el petróleo y el oro crecen de valor, así mismo suben las cotizaciones de los mercados y hasta las economías emergentes sacan su provecho como es el caso de Brasil y su revaluado Real.
Por lo tanto no se está frente a una mera discusión teórica sino ante un problema de intereses de magnitud con efecto práctico; y que está llamado a ser eje de controversias político-económicas en el futuro cercano ya que implica repartir nuevas cuotas de poder comercial y financiero en la aldea global.
Uno de los temores mas desarrollado sobre esta contienda es el riesgo de que China retire sus inversiones en dólares sumergiendo a la moneda americana en un cataclismo de pérdida de valor global; ya sea por intereses políticos, temores económicos o la sumatoria de ambos. Sin duda es poco probable un desastre de tal magnitud , toda vez que hace apenas unos meses las inversiones globales ,incluidas las de Asia ,“volaron” al dólar ante el temor de un desastre global que tenía precisamente como eje al país del dólar. Y las condiciones geopolíticas no cambiaron tanto desde entonces.
Pero en esta guerra de información y desinformación ,que tiene algo de sustento y bastante de picardía, hace apenas una semana algunos medios internacionales informaban la “anunciada gran venta de Bonos del Tesoro de EEUU por parte de China”.
De esta forma el diario del estado chino People´s Daily publicó un artículo el 18 de agosto que indicaba “una masiva descarga de las tenencias de deuda americana por primera vez en el año (2009). De acuerdo a la data publicada, durante el pasado mes de junio la tenencia de Beijing de esos activos financieros cayó en USS25.000 millones pasando a tener un stock de USS 776.400 millones, o sea un decrecimiento mensual del 3%.
La realidad es que China vendió cincuenta y dos mil millones de bonos americanos de corto plazo pero compró USS 27 mi millones de bonos de largo plazo. Con lo cual el se puede apreciar que el gigante asiático está apostando a EEUU a largo plazo y también a sacar ventaja de las mayores tasas de interés de ese país.
¿Porque entonces Beijing habría puesto tanto énfasis en remarcar su “fuerte salida de activos americanos”?.Para algunos analistas lo hicieron para usarlo como un fuerte mensaje doméstico e internacional.
1. -Fronteras adentro: para darle la impresión a su gente de que la economía China es mucho mas fuerte que la de EEUU y por lo tanto no tendría sentido tener deuda de un “país débil” y mejor usar los fondos en planes que revitalicen la demanda interna y así mejorar en el nivel de vida de los habitantes de ese país.
2. Internacionalmente: probablemente como una amenaza financiera hacia EEUU esperando conseguir algunas concesiones en las negociaciones en temas de comercio internacional, por ejemplo que se moderen las quejas por dumping contra la administración de Hu Jintao.
3.
Y si se mira en detalle el balance de la Tesorería China se puede completar el cuadro de la realidad.
Haciendo un poco de historia podemos recordar que desde el año 1998 los ciudadanos americanos incrementaron dramáticamente su consumo y por lo tanto se endeudaron cada vez más para financiar esa fiesta de gastos. A la vez la producción interna de manufacturas americanas se redujo enormemente recurriendo a las importaciones para abastecer su ávido mercado interno desde automóviles hasta prendas de vestir.
En este contexto Beijing disfrutó de un doble rol: le vendió enormes volúmenes de mercaderías al mercado de EEUU y a la vez le financió las compras comprando deuda del tesoro americano lo que ayudó a poner más dinero en el bolsillo de los consumidores que se endeudaron como nunca en la historia de ese país.
De esta manera Beijing encontró un lugar donde reinvertir rápidamente las abultadas divisas que le proporcionó el creciente comercio exterior, mientras estimulaba el consumo de sus productos en el mercado mas grande del mundo.
Por lo tanto y amparados en su bajo costo las manufacturas chinas inundaron los comercios del país del norte; mientras que las compras masivas de deuda soberana americana por parte de Beijing ayudaron a mantener bajas las tasas de interés. Así las familias yankees se endeudaron mas para comprar mas , completando la rueda de la felicidad.
Y esta historia digna de Disney World siguió hasta finales del año 2007 cuando estalló la “burbuja inmobiliaria en el norte”, en ese momento los asiáticos reaccionaron temerosos saliendo a cualquier precio de los activos americanos. Pero luego la crisis avanzó y parecía no haber activo financiero en el mundo en el cual protegerse, ni commodities ni acciones globales salvo, paradojicamente, los Bonos del Tesoro Americano.
¡Entonces China volvió a comprar deuda americana! Ya sea porque no ganaba nada ahogando a EEUU que era y es su mayor cliente o porque no tenía otro lugar mejor para guardar sus ahorros. Si cabe destacar que hubo un cambio de plazos de las tenencias de US Treasuries por parte de Jintao , ya que en el último trimestre de 2008 Beijing prefirió invertir en títulos americanos menores a un año como una manera de tener liquidez a mano. Por lo tanto las tenencias totales de deuda americana por parte de los chinos creció un 45% desde junio 2008 hasta ahora, y las de corto plazo pasaron de 2.6% a un 26.3 % en mayo de 2009.
Entonces es fácil concluir que la liquidación de bonos americanos por parte de China acaecidas durante Junio no cambiaron las reglas de juego.
Además, si algún día china decidiera salir masivamente del dólar, moneda en la cual atesora el 66% de sus reservas, no lo va a anunciar por los diarios porque se estaría disparando en su propio pié y podría causar una corrida gigante contra la moneda en la cual tiene sus propias inversiones.
Conclusiones.
Todos sabemos a esta altura que la crisis desatada en el año 2007 generó una enorme emisión monetaria por parte de los gobiernos que buscaron por ese camino dotar de dinero a sus mercados para reflotar la inversión y el consumo ,evitando también el colapso del crédito.
EEUU encabezó esa verdadera “inundación” de efectivo lo cual debilitó aún mas su moneda que ya venía fatigada por años de déficit fiscal y grosero endeudamiento.
Ahora los nuevos jugadores que emergen fortalecidos de la crisis reclaman un signo monetario fuerte y abandonar la hegemonía del golpeado “greenback”.
Estas dos fuerzas contrapuestas sin duda generarán en el tiempo un nuevo esquema monetario acorde a la nueva realidad económica del mundo.
Y mientras tanto cada uno de los actores económicos buscará posicionarse según sus intereses lo cuál generará mayores desacoples en las paridades cambiarias, llamadas en la jerga “oportunidades de arbitraje”.
Por eso será positivo para el inversor global meditar con cuidado de que manera y en que momento se protege de los cambios por venir. Caso contrario se correrá el riesgo de entusiasmarse con abruptos aumentos de algunos activos cuya fortaleza en el tiempo es dudosa, por ejemplo en relación al Euro.
Y mas en nuestro país, en el cual se piensa y gasta en dólares. Tal es así que mientras la moneda americana en el mundo tiende a perder valor, en Argentina hay momentos en que tiende a fortalecerse.
Fuentes
Fondo Monetario Internacional.
Unión de Bancos Suizos
Stratford
miércoles, 26 de agosto de 2009
China apuesta a la economía de EEUU
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1 comentario:
Hay algo de perverso en un sistema en que para tener dinero no hay mas que imprimirlo, pues evidentemente el papel y la tinta cuestan muy poco. Si el mundo completo costase 1 T$ (T de Tera, un billon de billones) los norteamericanos no tendrian mas que imprimir ese dinero (o crearlo electrónicamente, hoy en dia es lo mismo) y comprar el planeta al completo. Seguidamente no tendrian mas que negarse a aceptar el $ en pago de nada, y habrian timado al resto del mundo.
Ahora bien, China sabe perfectamente que ese dinero solo es papel, nada mas, pero como tiene sus bancos llenos de ese papel, no puede hacer nada contra el, mas que gestionar la situación. Así se tiene con una mano que apoyar el dolar, de manera visible, y con la otra, de forma menos visible ir cambiando sus reservas a otras monedas, y aún mejor, a activos reales, que no sean papel de nadie.
Pero este es un juego muy complejo, queda mucha pelicula por ver, ya que este tipo de movimientos son de calado historico.
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